«Las cada vez más frecuentes inundaciones que afectan periódicamente al Delta Medio e Inferior actúan como un factor de regulación poblacional. La abundancia de ciervos cae notablemente, no sólo porque los animales se ahogan, sino también porque los cazadores aprovechan estos momentos de vulnerabilidad para matarlos”, explicó Javier Pereira, investigador adjunto del Conicet.
“Los niveles altos de mortalidad pueden dejar a la población muy disminuida, comprometiendo seriamente sus chances de recuperarse y favoreciendo su extinción regional», advirtió.
Imagenes: Pollo Rodriguez